Por: Fernanda Rocha M.
Domingo 18 de Febrero, era temprano y el sueño era algo que no podía ocultar, pero sabía que este día era especial, no iba a ser rutinario, no me iba a aburrir viendo televisión o escuchando música, por primera vez en muchos años me levante con la ilusión de conocer un lugar y mejor aún, de descubrirlo con dos grandes amigas, con las cuales he estado viviendo muchas cosas extraordinarias.
Llegando al lugar donde nos veríamos, y más allá de eso, durante el camino hacia Tonanzintla, me preguntaba como sería este viaje que nos pasaría de bueno y de malo, porque claro esta que de un viaje ya sea cerca o lejos, te puedes esperar de todo.
Cuando llegamos a Tonanzintla y nos indicaron el camino para ir al Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE) nos pudimos dar cuenta de la cantidad de gente que iba a la feria, bueno y a las actividades que la institución estaba ofreciendo para todas las edad, gustos y demás en los que tomaron en cuenta a niños para poder despertar en ellos el interés en la ciencia, en todas sus ramas.
Lo primero que se podía ver era la mesa en la cual te daban una guía en la cual te mencionaban las actividades de la feria y del INAOE así como te dicen que hay transporte gratis a las 6:30 y a las 8:00. Un joven nos informó que las actividades de la feria empezaba a las 10:00 a.m. y las del instituto a las 11:00 a.m., así que decididas a dar un paseo por el lugar para conocer un poco más empezamos a caminar y nos pudimos dar cuenta de que este es un pueblo en el que tal vez por la hora o por el día o por alguna otra razón no tiene muchas actividades, ya que eran alrededor de las 9:45 a.m., cuando caminábamos y el lugar parecía bastante tranquilo.
Al llegar a la Iglesia principal del lugar pudimos ver que era en esa zona en la que la actividad era un poco más fluida y en la cual había más gente, ¿la razón? Se había acabado la misa y era como podíamos ver más gente en la calle, niños correr, gritar y hasta mariachis que iban a la casa de la familia que tenía uno de los cargos más importantes para ellos que es el de cuidar de la iglesia.
Al regresar al INAOE, la actividad había comenzado los niños corrían y hacían planes para poder ir a algunos de los talleres que ofrecían -papiroflexia, libros, física, etc.- que tenia sus horas puestas y que solo esperaban la llegada de los interesados, por otro lado la biblioteca era uno de los lugares que aunque no se veía con mucha gente la poca que estaba en ella, se veía con el interés de entrar y poder buscar los datos deseados así como de conocerla.
Empezamos a caminar por el lugar designado para poder exhibir los libros, algunos estantes estaban cerrados, otros empezaban a acomodar libros y otros ya tenían todo listo y empezaban a mostrarte ya los ejemplares con los que contaban. Había libros para todos los gustos, para los físicos, astrónomos, había libros de literatura, de acción, de terror, los clásicos, había libros como la Iliada o la Odisea en versión para niños, había discos, había juegos para niños y hasta libros escritos en el método para invidentes -braile- del cual había un estante dedicado a estos libros.
No todo era relacionado con esto, también había un estante con información sobre el INAOE en el que te hablaban sobre el microscopio, de los cursos y posgrados que el instituto esta proporcionando a profesionistas que estén relacionados con las ramas de Física, electrónica, Ciencias Computacionales y demás carreras afines , también había un lugar para el INEGI en donde te proporcionaban mapas geográficos de la región y estadísticas relacionadas con la población actual y otro de los espacios que había era de un programa de alfabetización de la BUAP, llamado ¡Apúntate! En el cual buscan voluntarios que quieran enseñar a leer y escribir a gente de pocos recursos en las diferentes zonas de Puebla.
Dieron las 12 del día y todo parece que comenzaba ahí, las presentaciones de libros empezaban , el primer libro que recuerdo que presentaron fue el titulado El libro de las cochinada de la UNAM y así como este había una lista larga de libros que serían presentados ese día.
Por los jardines se veía niños corriendo y gritando la fiesta comenzaba para todos o por lo menos para la mayoría, los talleres eran perfectos, la gente llegaba cada minuto y segundo, los libros desde su ejemplar más barato hasta el más caro eran revisados y en ocasiones eran comprados. Al parecer la gente va cambiando con el paso del tiempo y esto puede ser muestra de ellos, los libros ahora están siendo reconocidos como una gran compañía.
Todo esto con el paso de la tarde fue acabando hasta el grado de que todo se cerro y con esto concluyó un año más la Feria Internacional del Libro en Ton
Llegando al lugar donde nos veríamos, y más allá de eso, durante el camino hacia Tonanzintla, me preguntaba como sería este viaje que nos pasaría de bueno y de malo, porque claro esta que de un viaje ya sea cerca o lejos, te puedes esperar de todo.
Cuando llegamos a Tonanzintla y nos indicaron el camino para ir al Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE) nos pudimos dar cuenta de la cantidad de gente que iba a la feria, bueno y a las actividades que la institución estaba ofreciendo para todas las edad, gustos y demás en los que tomaron en cuenta a niños para poder despertar en ellos el interés en la ciencia, en todas sus ramas.
Lo primero que se podía ver era la mesa en la cual te daban una guía en la cual te mencionaban las actividades de la feria y del INAOE así como te dicen que hay transporte gratis a las 6:30 y a las 8:00. Un joven nos informó que las actividades de la feria empezaba a las 10:00 a.m. y las del instituto a las 11:00 a.m., así que decididas a dar un paseo por el lugar para conocer un poco más empezamos a caminar y nos pudimos dar cuenta de que este es un pueblo en el que tal vez por la hora o por el día o por alguna otra razón no tiene muchas actividades, ya que eran alrededor de las 9:45 a.m., cuando caminábamos y el lugar parecía bastante tranquilo.
Al llegar a la Iglesia principal del lugar pudimos ver que era en esa zona en la que la actividad era un poco más fluida y en la cual había más gente, ¿la razón? Se había acabado la misa y era como podíamos ver más gente en la calle, niños correr, gritar y hasta mariachis que iban a la casa de la familia que tenía uno de los cargos más importantes para ellos que es el de cuidar de la iglesia.
Al regresar al INAOE, la actividad había comenzado los niños corrían y hacían planes para poder ir a algunos de los talleres que ofrecían -papiroflexia, libros, física, etc.- que tenia sus horas puestas y que solo esperaban la llegada de los interesados, por otro lado la biblioteca era uno de los lugares que aunque no se veía con mucha gente la poca que estaba en ella, se veía con el interés de entrar y poder buscar los datos deseados así como de conocerla.
Empezamos a caminar por el lugar designado para poder exhibir los libros, algunos estantes estaban cerrados, otros empezaban a acomodar libros y otros ya tenían todo listo y empezaban a mostrarte ya los ejemplares con los que contaban. Había libros para todos los gustos, para los físicos, astrónomos, había libros de literatura, de acción, de terror, los clásicos, había libros como la Iliada o la Odisea en versión para niños, había discos, había juegos para niños y hasta libros escritos en el método para invidentes -braile- del cual había un estante dedicado a estos libros.
No todo era relacionado con esto, también había un estante con información sobre el INAOE en el que te hablaban sobre el microscopio, de los cursos y posgrados que el instituto esta proporcionando a profesionistas que estén relacionados con las ramas de Física, electrónica, Ciencias Computacionales y demás carreras afines , también había un lugar para el INEGI en donde te proporcionaban mapas geográficos de la región y estadísticas relacionadas con la población actual y otro de los espacios que había era de un programa de alfabetización de la BUAP, llamado ¡Apúntate! En el cual buscan voluntarios que quieran enseñar a leer y escribir a gente de pocos recursos en las diferentes zonas de Puebla.
Dieron las 12 del día y todo parece que comenzaba ahí, las presentaciones de libros empezaban , el primer libro que recuerdo que presentaron fue el titulado El libro de las cochinada de la UNAM y así como este había una lista larga de libros que serían presentados ese día.
Por los jardines se veía niños corriendo y gritando la fiesta comenzaba para todos o por lo menos para la mayoría, los talleres eran perfectos, la gente llegaba cada minuto y segundo, los libros desde su ejemplar más barato hasta el más caro eran revisados y en ocasiones eran comprados. Al parecer la gente va cambiando con el paso del tiempo y esto puede ser muestra de ellos, los libros ahora están siendo reconocidos como una gran compañía.
Todo esto con el paso de la tarde fue acabando hasta el grado de que todo se cerro y con esto concluyó un año más la Feria Internacional del Libro en Ton
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